ROMA. Decenas de miles de personas marcharon por las calles de Roma el sábado 10 de noviembre, para manifestar su disenso a las políticas del gobierno Lega-M5S en el tema de la inmigración. La marcha, organizada por la red #indivisibili (indivisibles) había visto el apoyo de cientos de organizaciones, ONGs y asociaciones a lo largo de toda Italia.
Migrantes, movimientos, estudiantes, centros sociales ocupados, participaron en la manifestación para decir no a la política de puertos cerrados de Matteo Salvini y a las medidas introducidas en la propuesta de ley denominada «decreto sicurezza». En la marcha fueron expuestas pancartas como «Acojer a todos», «extranjeros no nos dejéis solos con los fascistas», «welcome migrants» y «nunca con Salvini».
En la marcha era presente el alcalde de Riace, Mimmo Lucano, que ha sido aplaudido por los asistentes. El alcalde del pequeño pueblo de Calabria se ha convertido en un símbolo de la solidaridad hacia los migrantes.
Alcune foto di questo mare di Umanità.#Roma #Indivisibili pic.twitter.com/ODZ1uRKFzQ
— Il Salto (@IlSalto) 10 novembre 2018
Los organizadores, que han hablado de una participación de cien mil personas, han denunciado los numerosos controles a las puertas de Roma. Los autobuses llenos de manifestantes procedentes de otras ciudades fueron parados y controlados a fondo por la mañana, y muchos manifestantes han llegado tarde a la marcha. En algunos casos, denuncian los manifestantes, la policía controlaba incluso las pancartas. Una practica que ha sido definida intimidatoria por los manifestantes.
Be the first to comment