La Pizzeria de Gino Sorbillo, en Nápoles, sufrió un atentado durante la noche del 16 de enero. La pequeña bomba, que fue detonada durante la noche, ha causado daños por miles de euros. Se trata probablemente de un atentado de intimidación de la mafia napolitana, la Camorra. Sorbillo ha afirmado que no se dejará intimidar. La pizzeria de Gino Sorbillo se encuentra en el centro de Nápoles, en la famosa y transitada via dei Tribunali y ya había sido objeto de un atentado incendiario hace 6 años.
Mucha solidaridad
La noticia de la explosión ha tenido mucho resalte en los medios de comunicación italianos porque Sorbillo se ha convertido en los últimos 5 años en uno de los pizzeros italianos más conocidos. La pizzeria de Nápoles es considerada una de las mejores de la ciudad, y Sorbillo ha abierto otras sedes (más de diez) en Italia y al extranjero (incluso en Nueva York). Sorbillo en el pasado no solo se pronunció contra la mafia sino también contra el racismo y a favor de la solidaridad, con iniciativas como la «pizza sospesa», que sigue la iniciativa más antigua del «caffè sospeso».
Es considerado un símbolo antimafia por no ceder a las intimidaciones del racket, que históricamente pide un impuesto a los comercios de la ciudad a base de intimidaciones y amenazas («pizzo«). Además reivindica haber dado vida a una zona del centro donde antes no se podía pasear por la noche e invita siempre los napolitanos a denunciar las amenazas, en un territorio donde el control mafioso es fortísimo.
Gino Sorbillo publicó en Facebook la noticia de que su pizzeria había sido objeto de un atentado, con una foto en la que sujeta un cartel con escrito «Pizzeria cerrada por bomba». En su post en Facebook escribe también: «Pido perdón a toda la Nápoles buena, a la Italia buena y a todas esas personas que viven honestamente. Estos eventos tan fuertes hacen que se desmoralice la sociedad». El pizzero ha recibido una avalancha de mensajes de solidaridad, también por parte de las autoridades.
Los atentados no son cosa nueva
Al margen de este atentado, que ha tenido mucho resalte mediático, la zona de Nápoles no es nueva a atentados de intimidación por parte del «racket». Son ya ocho las bombas que han detonado en los últimos 30 días frente a tiendas de Afragola, un centro situado en las afueras de Nápoles. El sábado 19 de enero tendrá lugar una manifestación, promovida por Libera y Anpi, para decir basta a la violencia.
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